jueves, 31 de enero de 2008

Porqué aprobé fisicoquímica

Prometo, después de esta, no contar más batallitas sobre como aprobé alguna que otra asignatura en la carrera, básicamente, porque exceptuando una tercera en la que medió más la suerte que mis conocimientos, el resto fueron aprobadas en condiciones normales, es decir, sin chuletas.

Sin embargo, fisicoquímica es un ejemplo claro, de como en la vida se puede tener o no tener fortuna. Para los que no conozcáis de que va eso de la fisicoquímica, os diré que, de acuerdo al renombrado químico estadounidense Gilbert Lewis, "La Química Física es cualquier cosa interesante", (wikipedia dixit). Así parece hasta bonito, pero cuando desde pequeño has aborrecido la física y has aprobado química con malas artes, el conjunto AUB, donde A es la física y B es la química, se planteó desde el principio como una pesadilla de difícil resolución.

Os prometo que el primer año (segundo de carrera) que me toco lidiar con esta asignatura, intenté con todas mis fuerzas, aprobarla. Asistí a las primeras clases del curso con poco entusiasmo, pero decidido a no tener problemas. La cosa, sin embargo, se truncó cuando las partidas de mus en la cafetería de la facultad, se cruzaron en mi camino.

El resultado a mi falta de esfuerzo, fue contundente. Suspenso en febrero y en junio y "no presentado" en septiembre.

Al año siguiente, mi padre, hombre sabio y cabal, decidió que puesto que su hijo no tenía demasiadas expectativas con la asignatura, lo mejor era pagarle una academia que le permitiese alcanzar los mínimos exigidos para cruzar el Rubicón con decoro. Así pues, cada mes destinaba 10.000 pts del año 1990 en la formación académica de su vástago. Llegado el examen de febrero, ese vástago volvió a suspender el primer parcial, pero consciente de la reprimenda que le aguardaba en casa, decidió echarse un farol (para eso había aprendido a jugar al mus en el año anterior) declarando que había obtenido un aprobado raspado.

Tras esto, y visto que tampoco la academia daba para más, me pasé los siguiente meses gastándome las 10.000 pts de la academia en mi propio beneficio. Cines, copas y cenas, enter otros, dilapidaban cada mes esa pequeña fortuna que caía en mis manos.

Sin embargo, al igual que a la díscola cigarra le llega el otoño sin haberse aprovisionado para el mismo, un día amaneció en el mes de junio y con él, vinieron los exámenes.

El día anterior a la prueba de fisicoquímica, me encontré sin conocimientos de la materia, sin tiempo para adquirirlos y con la amenaza fantasma de un padre furibundo por el dinero malgastado. Así que decidí hacer lo único que podía: dejar que me pillasen copiando en el examen. De este modo, suspendería igual, pero la bronca paterna cambiaría del "¿Que has estado haciendo todo este tiempo?" al "Hijo,¡Tu eres tonto!", que la verdad, me parecia menos lesiva para mi autoestima.

Así, con buenas artes preparé una hermosa chuleta con lo que mis compañeros y amigos (que gentilmente me habían pasado sus apuntes), me indicaron era lo más importante de la materia. Además, aleccionado por uno de ellos, me leí el tema de las "propiedades coligativas", que era una de las obsesiones del profesorado.

El objetivo del plan era fácil. En ese departamento (que constaba de varias asignaturas de las que ya me había examinado y milagrosamente aprobado) había un profesor, que se dedicaba durante el examen a ponerse en la retaguardia del alumnado, acechando a los que copiaban, hablaban o sacaban la chuleta, con unos niveles de éxito en pilladas bastante notable. Yo esperaría al momento oportuno, para sacar la chuleta y ser pillado infraganti con la misma.

Sin embargo, la diosa fortuna estuvo ese día conmigo, aunque al principio no lo considerase como tal. Llegado el momento del examen, el profesor-policía fue requerido para vigilar otra sala, dejándonos a nosotros con los típicos maestros pasotas. De esos que se sientan en la mesa, conversan entre ellos, y de rato en rato levantan la vista haciendo como que vigilan, pero sin mirar a nadie en concreto. Como entenderéis, al ver eso no me quedó más remedio que mirar mi examen a ver de que iba. Primera sorpresa. Define la propiedad coligativa Presión osmótica (tantos años y todavía me acuerdo). "Bueno - pensé-, por lo menos no haré el ridículo", y escribí lo que recordaba haber leído el día anterior. Segunda pregunta, "¡Ahí va! Si esa la tengo en la chuleta", así que con cuidado y disimulo la saqué y copié. Lo mismo ocurrió con el resto de las preguntas y problemas. Algunos me los inventaba, y en otros tenía la información necesaria para no dejar la pregunta en blanco. Cuando una hora y pico después (nunca he aguantado en un examen más de dos horas) entregué los folios a los docentes, me sentí el chaval más afortunado de la carrera. Había conseguido aprobar un hueso, pasarmelo de cine durante dos años y ahorrarme un bronca con sermón incluido por parte de mi progenitor.

Lo mejor de todo, es que en todos estos años de trabajo, el único conocimiento que he necesitado de la fisicoquímica, ha sido el de la presión osmótica, curiosamente el que me sabía.

5 comentarios:

bastekcat dijo...

!!!Yo no aprobé la Físico Química!!!.
Después de acabar la carrera de Biología leí la tesis de licenciatura y acto seguido dejé mis estudios, me casé y me fui a vivir al Norte de España, al Pirineo aragones. Estaba tan acostumbrada a estudiar en Málaga, con su clima primaveral y a estar todo el día fuera de casa que me aburría como una ostra. Además a mi marido lo veía menos que de novios, que ya es decir. Así que a los dos meses me matriculé de Farmacia, cerca de donde vivía: En Granada.
Me convalidaron prácticamente tres cursos pero no pude librarme de algunas asignaturas como la Física Química.
Iba y venía en avión a hacer las prácticas y los exámenes y comprendereis que si estaba tres o cuatro días en Graná, pues....
Resultado final:
Me enteré que había suspendido la F-Q el mismo día que me enteré que estaba embarazada.
Aquí se acabó mi aventura con la Farmacología, parasitología, ...
Creeme que te comprendo, menuda patata.

Firebrand dijo...

Pues mi expreriencia es estas materias, tan alejadas de mi especialidad—soy Contador Público—
es que son mas aburridas que chupar un clavo.

DIÓGENES dijo...

Yo fui hombre de letras, aún creo que lo soy, pero fui vasallo de mi destino, y traidor de mis sueños...

Era estudiante de aprobados rasos en química, y en física, y en matemáticas, y de alguna matrícula en historia, en literatura, en lengua...

Que soy ahora, os preguntaréis...

Contable.

Un saludo.

Me gusta vuestro blog.

Los Caballos de Troya dijo...

Mi madre estudió farmacia, aquí en Barcelona, en los años sesenta. Me comenta que también tuvo que enfrentarse a esta asignatura y al final la aprobó con chuletas en los bolsillos de su falda...

Yo sólo toque la química en 8º de EGB y la física en 2º de BUP. Después me olvidé, completamente, de estas dos asignaturas para siempre.

Mi destinó me llevó a elegir letras mixtas, enfrentándome sólo a las malvadas matemáticas...

Y mira tú por dónde, me doy cuenta que he acabado teniendo la misma profesión que diógenes.

Pasad buena tarde de domingo

Unknown dijo...

pues a mi me amargo primero de carrera y me esta amargando el ultimo año...estoy en 6ºF, es decir, Fisica, Farmacologia, Farmaceutica especial, Farmacognosia, Biofarmacia....y precisamente mañana tengo el examen de practicas de fisica jajajaja en realidad he encontrado este blog buscando en google "examenes de practicas fisicoquimica granada" jajajjaa

saludos!!